Segundo encuentro del ciclo de conversatorios “40 años de democracia. Luchas, conquistas y debates desde la perspectiva del sindicalismo universitario”
“Poder financiero, deuda y fuga de divisas” fue el título de la segunda mesa de “40 años de democracia: Ciclo de conversatorios sobre luchas, conquistas y debates desde la perspectiva del sindicalismo universitario”, con las exposiciones de Mercedes Marcó del Pont, Secretaria de Asuntos Estratégicos de la Presidencia de la Nación; Germán Muiño, miembro del Centro de Economía Política (CEPA); y Raúl Dellatorre, periodista especializado en Economía del diario Página 12.
Gabriel Martínez, del Instituto de Estudios y Capacitación (IEC-CONADU), abrió y moderó el encuentro dando cuenta del mecanismo de fuerte endeudamiento argentino que no es utilizado para incorporar activos y acumular capitales sino para financiar fugas de capitales, y que ha sido característico tanto del período 1976-2000 como de 2015-2020.
Dellatorre fue el primer invitado en tomar la palabra: “Para los países dominantes el ingreso por capitales es una renta adicional y en todo caso la puja es por el reparto entre ellos. A nosotros la fuga nos condena, nos toca perder siempre. Por eso es un desafío permanente y central para una economía como la nuestra que busca desarrollarse, que busca una distribución más justa y menos dependencia del capital extranjero; porque encima somos dependientes del peor capital, el financiero especulativo. Definir esto como un eje de políticas económicas, independientes, soberanas y realmente distributivas me parece fundamental.
Dellatorre puso el foco, asimismo, en las articulaciones entre el poder financiero y ciertos sectores políticos: “El capital financiero tiene expresión política, no es simplemente un sector que hace negocios. Es un sector que busca control político. En Argentina han llegado a gobernar el país cuando pusieron de presidente a uno de los apellidos típicos del capital concentrado nacional. Y lo van a volver a intentar. Además, tienen capacidad de daño sobre los sectores realmente democráticos, sobre los proyectos independientes y este poder de daño lo ejercen”.
A su turno, Muiño se ocupó de señalar los desafíos: “Sin dudas, surge la necesidad de renegociar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. También, hace falta cierto orden macroeconómico y estabilizar la economía porque con estos niveles de inflación se complican un montón de cuestiones. Por ejemplo, en este contexto, ¿cómo se hace para generar los estímulos necesarios para que la moneda nacional recupere el rol de ser reserva de valor y no resignarnos a vivir eternamente en el bimonetarismo? En este sentido es importante una tasa real positiva y que el balance de pagos no cierre a costa de ciclos de endeudamiento insostenibles”.
Muiño resaltó a su vez: “La urgencia por ampliar la oferta de dólares por parte del sector privado y de distintos sectores que puedan dinamizar las exportaciones sin tener que estar pendiente de rezarle al dios de la lluvia y de un sector tan concentrado como es el cerealero”.
Sobre este punto se manifestó la secretaria de Asuntos Estratégicos, Marcó del Pont: “La transición energética es mucho más que la posibilidad de contar con divisas para aliviar la restricción externa. El desarrollo de la economía del litio es una oportunidad para fortalecer la industrialización y reducir las brechas territoriales que tiene nuestro país”.
Y continuó: “Junto con las provincias de Catamarca, Salta, Jujuy y las áreas de Minería, Energía, Interior, Industria y Ciencia y Tecnología avanzamos desde la Mesa del Litio en la elaboración de un proyecto de ley que compatibilice la potencialidad exportadora con la disponibilidad del recurso para la industrialización local, un proyecto que permita reducir las asimetrías existentes al interior del país”.
“40 años de democracia: Ciclo de conversatorio sobre luchas, conquistas y debates desde la perspectiva del sindicalismo universitario” está pensado a partir de ejes temáticos que se desarrollarán una vez por mes con la participación de distintos invitados e invitadas.