Universidad de Chilecito: Con un concurso irregular pretenden dejar cesante al Secretario General del Gremio de la CONADU
El Secretario General del Gremio Docente de la Universidad Nacional de Chilecito, Alejandro Moreno, puede perder su cargo porque el rector interventor lo concursó de forma irregular e ilegítima. Esta situación vulnera la tutela sindical establecida por ley.
CONADU, la Federación Nacional de Docentes Universitarios, presentará las demandas necesarias para que se respete el cargo del representante de los docentes, que fue electo por un 97 por ciento de los votos. “No vamos a permitir que se atente contra la libertad sindical. El intento de cesantear al Secretario General del gremio, apunta a amedrentar a los docentes que se organizan”, declaró Carlos De Feo, Secretario General de CONADU.
La Federación iniciará acciones legales amparándose en el precedente del reciente fallo a favor de los docentes riojanos de ARDU. El llamado a concurso además de ser irregular es ilegítimo: el rector interventor no fue electo por la asamblea, sino que Norberto Caminoa fue nombrado para normalizar la universidad.
De acuerdo a la ley de normalización, el llamado a concurso debe hacerse cuando haya finalizado el período de organización. Y no es el caso. El Ministerio de Educación todavía no había aprobado el estatuto de la Universidad de Chilecito, ni la CONEAU había aprobado el proyecto institucional.
En comparación, Alejandro Moreno sí fue electo por el 97 por ciento de los docentes en 2009. El Secretario General del gremio de Chilecito tenía a su cargo la materia Derecho Administrativo y otras tres como carga adicional. Es un conocido dirigente de la zona, respetado por haber actuado como defensor de casi 3.000 trabajadores cesanteados durante el vaciamiento de las principales empresas locales durante los 90.
“Este no es un rector elegido, – explicó Moreno – fue nombrado por el Ministerio y está armando su base echando docentes y contratando amigos”. Los únicos que tienen derecho a voto en la asamblea donde se elige el gobierno de la universidad son los docentes concursados.
En rigor, se trata del tercer intento para amedrentar al Secretario General, y al resto de los agremiados. En 2007 se constituyó la comisión de docentes para fundar el gremio y el 12 de julio en una asamblea extraordinaria votaron a mano alzada a sus representantes. Moreno resultó electo como Secretario General. En respuesta, Caminoa dejó a Moreno sin efecto en la carga de las tres materias adicionales que tenía.
Más adelante, en el verano de 2008, durante el receso, el rector interventor llamó a varios concursos, entre ellos para el cargo y la materia de Moreno. Con una diferencia: en lugar de requerir un cargo de dedicación exclusiva (que con 15 años de antigüedad percibe un ingreso de entre 5 y 6 mil pesos), llamó para un cargo simple (que con la misma antigüedad implica sólo 1.500).
Como todavía no se había aprobado el estatuto de la universidad, el incipiente gremio presentó una impugnación. La Secretaría de Política Universitaria hizo caso a la solicitud y mandó una nota donde dice que el rector se había “excedido en sus funciones” y ordena detener el concurso.
La nota está firmada por el mismo Alberto Dibbern, Secretario de Política Universitaria. Aunque en la nota no declara nulo el llamado a concurso, en derecho se entiende que si una autoridad es incompetente para determinada acción, el hecho es anulado. Sin embargo, cuando en 2009 se aprueba el estatuto de la universidad, el rector puso en marcha el mismo llamado. Los concursos, entre los cuales estaba Derecho Administrativo, se llevaron a cabo en Buenos Aires. Los docentes tuvieron que viajar desde Chilecito para concursar.
CONADU entiende que esta situación – ilegal, ilegímita y poco transparente – deberá dar marcha atrás.