Una educación de calidad para las niñas y las mujeres es progreso para todos
El Día Internacional de la Mujer es un punto de convergencia tanto para los movimientos de mujeres como para los movimientos sindicales, ya que la conmemoración del primer Día de la Mujer surgió a raíz de las acciones del movimiento sindical en Norteamérica y Europa a finales del siglo XX.
Las organizaciones afiliadas a la Internacional de la Educación (IE), que representan a 30 millones de docentes en 400 organizaciones en 171 países y territorios del mundo, consideran este un día primordial para las transformaciones requeridas, en todas las sociedades, para alcanzar la igualdad de género y garantizar y promover los derechos de la mujer.
La educación no sólo es un bien público y un derecho humano que también permite el ejercicio efectivo de otros derechos y favorecer al empoderamiento de las niñas y las mujeres. Sin embargo, el derecho a la educación se les niega a muchas sea por falta de compromiso político, financiación educativa insuficiente y las repercusiones de las desigualdades. La intersección del género con otras identidades sociales (como por ejemplo la etnia, religión o creencia, raza, estatus económico, sexualidad, edad o discapacidad) significa a menudo que grupos de niñas o mujeres más marginados tienen menos posibilidades de acceder a una educación de calidad.
Unámonos por la Educación Pública
Porque la calidad de la oferta educativa actual está amenazada en muchos países, las afiliadas de la IE están centrando sus esfuerzos en movilizarse en sus propios países y a escala internacional para reclamar que los gobiernos y los responsables políticos mejoren la calidad de la educación y garantizar su gratuidad y sea accesible para todos y todas.
La campaña mundial de la IE, Unámonos por una Educación de Calidad, tiene por objetivo garantizar que la prestación de una educación de calidad para todos y todas se mantenga en la agenda para un futuro sostenible, pacífico y próspero. Según la IE, la definición de la educación calidad comprende tres elementos claves: la enseñanza de calidad, materiales actualizados de calidad para la enseñanza y el aprendizaje, y entornos de calidad para la enseñanza y el aprendizaje.
La educación de calidad proporciona competencias necesarias para participar y tener éxitos a nivel local y global, y el Informe de Seguimiento de la Educación para Todos UNESCO EPT 2013 demuestra que la educación contribuye activamente al desarrollo humano sostenible y democrático de la sociedad.
La educación como derecho habilita a las mujeres en derechos y para la igualdad de género
Tener acceso a una educación gratuita y de calidad es particularmente importante para las niñas y las mujeres, no sólo porque la educación las habilita para el ejercicio de otros derechos, sino también por el impacto que tiene en la familia y en la sociedad, los logros educativos de la mujer.
La cantidad y calidad de la educación que proporcionan madres y padres guarda relación directa con los logros de sus hijos e hijas en el plano educativo. Y la educación de una madre suele tener mayor influencia en las oportunidades en la vida de sus hijos e hijas porque contribuye a una mejor educación para la siguiente generación. Una mujer que ha recibido una educación goza de una posición más fuerte para negociar en el seno de su familia y para negociar con su marido, lo cual puede permitirle garantizar más recursos para sus hijos e hijas (UNFPA, 2013), y las investigaciones recientes demuestran que esa madre también participará en un abanico de toma de decisiones más amplio en el hogar que una mujer que no haya recibido una educación.
Las mujeres y niñas que han recibido una educación entienden la importancia de la atención sanitaria.
Gracias a las mejoras en la educación de las niñas entre 1990 y 2009 se pudieron salvar las vidas de 2,1 millones de niñ@s menores de cinco años de edad (Informe de Seguimiento de la Educación para Todos 2013, UNESCO, 2013). Y podrían salvarse otros 3,9 millones de vidas si todas las mujeres tuvieran acceso a una enseñanza primaria y secundaria.
Aunque reconocemos el potencial innegable de la educación como derecho habilitador, en tanto que comunidad mundial docente que a diario esta en el aula con el estudiantado, somos conscientes de que el acceso a la educación puede instrumentalizarse de diversas maneras que termina por consolidar aún más las desigualdades de género, vulnerando los derechos de las mujeres y las niñas. En sociedades caracterizadas por formas extremas de la desigualdad de género, donde el rol de las mujeres se define en términos reproductivos, sólo se permite alfabetizar a las niñas a fin de que puedan convertirse en mejores esposas y madres. Por tanto, el derecho a la educación debe conceptualizarse y ser aplicable en los términos más amplios posibles, más allá de la alfabetización, a fin de incrementar las posibilidades de las niñas y las mujeres a una vida digna sin verse limitadas a salarios miserables, trabajos eventuales y precarios al margen del mercado laboral.
Más maestras como líderes en los sindicatos de educación
Las afiliadas de la IE reclaman unidas una educación de calidad para todos y todas, y estan decididas a abordar las cuestiones de la igualdad de género así como los derechos de la mujer y su empoderamiento al interior de las estructuras sindicales y organizativas.
La segunda Conferencia de la Mujer de la IE se celebrará en Dublín, República de Irlanda, del 7 al 9 de abril de 2014. El tema de la conferencia es Las mujeres en los sindicatos y la educación: de las palabras a los hechos.
El programa de la conferencia plantea cuestiones clave con relación a la organización y el liderazgo femenino en los sindicatos de la educación y la participación de mujeres y niñas en -y la finalización satisfactoria de– una educación de calidad. Participantes de la conferencia abordarán cuatro áreas que las afiliadas de la IE han subrayado como cruciales para el ejercicio efectivo de los derechos de las mujeres y las niñas en la educación y en los sindicatos y organizaciones de docentes:
1. El liderazgo de las mujeres es un asunto inconcluso en los sindicatos de educación – es hora de pasar de la retórica a los cambios: las afiliadas de la IE quieren redoblar sus esfuerzos para organizar a un mayor número de mujeres docentes y que hayan más mujeres ocupando puestos de liderazgo en sus sindicatos y organizaciones.
2. “La educación transforma vidas” (lo demuestra una y otra vez las estadísticas del Informe de Seguimiento de la EPT UNESCO 2013). Para que esa transformación sea sostenible, la educación de calidad debe estar desprovista de contenidos engañosos, discriminatorios o que promuevan estereotipos o creencias generalizadas de las personas basadas en el género, la etnia, religión o creencia, raza, estatus económico, sexualidad, edad, discapacidad u otra situación o identidad social. Las afiliadas de la IE quieren redoblar esfuerzos para la eliminar la discriminación y los estereotipos en los contenidos educativos.
3. La violencia contra docentes y estudiantes es cada vez más visible, dentro y fuera de las escuelas, en el mundo. Las afiliadas de la IE quieren tomar la iniciativa, como organizaciones y sindicatos de docentes, para asegurarse de que se hagan todos los esfuerzos posibles para garantizar, a nivel internacional, nacional y local, que las escuelas sigan siendo lugares seguros tanto para el profesorado como el estudiantado.
4. La educación de calidad implica una educación que sea igualmente accesible a todos y todas: niñas y niños, grupos mayoritarios y minoritarios, ricos y pobres. Las afiliadas de la IE hacen un llamado al mundo entero a unirse por la educación de calidad, y a garantizar que la igualdad siga siendo primordial en la agenda de la educación de calidad a adoptarse en el marco de desarrollo sostenible posterior al 2015.