Denuncia: En Chilecito sobornan a los docentes para que se desafilien al gremio
El clima de hostigamiento que viven los docentes de la Universidad Nacional de Chilecito (UNC) sigue creciendo. La nueva modalidad que adoptaron las autoridades, que responden al rector Norberto Caminoa, consiste en llamar a los docentes agremiados en la Asociación de Docentes de la Universidad de Chilecito (ADUC) y ofrecerles firmar un carta documento donde desconocen su afiliación, renuncian a esa supuesta afiliación y solicitan el reintegro de los aportes. Además les ofrecen 50 pesos a cambio de su firma. CONADU demanda que el Ministerio de Educación de la Nación y el Consejo Inteuniversitario Nacional tomen cartas en el asunto.
No es casual, que haya sucedido durante abril, puesto que es cuando se renueva la designación de los docentes interinos. En el caso de los docentes concursados, la práctica habitual es que más allá de que cumplan su trabajo con dedicación parcial o full time, solamente llamen a concursos por dedicación simple. En caso de trabajar más horas, se aumenta la dedicación mediante una resolución que debe renovarse anualmente o semestralmente. “Esto convierte al docente en el trabajador más precarizado del sistema”, explicó Raquel Cano, secretaria adjunta de ADUC.
Al momento de afiliarse, todos los docentes han firmado una ficha. Con la carta documento que son inducidos a firmar niegan este hecho. Además, ADUC nunca ha recibido los aportes que ahora reclaman los supuestos desafiliados.
Las prácticas irregulares en la UNC son moneda corriente. Durante 2010, CONADU denunció el desarrollo de concursos por cargos docentes de forma ilegal e ilégitima. Con este mecanismo dejaron sin su cargo docente al Secretario General de ADUC, Alejandro “Pichico” Moreno, en una clara maniobra para desalentar a los trabajadores docentes universitarios a tomar medidas de acción gremial.
“En las zonas aisladas del país profundo, donde los ingresos mayoritarios de la población llegan desde las administraciones públicas, se ha instalado una cultura de la dádiva que dificulta la defensa de los derechos de los trabajadores y la actividad gremial democrática”, analizó Cano. Desde CONADU repudiamos, una vez más, ete tipo de prácticas y demandamos una respuesta por parte del Ministerio de Educación de La Nación y del Consejo Inteuniversitario Nacional intervengan para garantizar la libertad sindical.