La escandalosa administración de la información

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El sábado 12/03 el diario La Nación publicó un editorial sobre el Instituto Universitario Nacional de Derechos Humanos “Madres de Plaza de Mayo” (IUNMA), en el que se hace referencia a una supuesta ostentación del presupuesto asignado a la institución como un “perverso manejo político e ideológico” del gobierno anterior.

Desde ADIUNMA, sindicato de docentes del Instituto, queremos aclarar varios de los aspectos mencionados en esa nota, no sólo para desmentir las calumnias mal intencionadas de su anónimo/a autor/a, sino también para dar a conocer a la opinión pública parte de nuestro trabajo en dicha institución.

La nota hace referencia a deudas que nada tienen que ver con el Instituto dado que la Ley 26995, de creación de nuestro Instituto, establece claramente que el Estado no asumió ningún pasivo de la Fundación Madres de Plaza de Mayo. Más aun: ningún/a docente ha reclamado al Estado siquiera las deudas que la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo sostenía con ellos/as con fecha previa al momento de la creación del Instituto Universitario. La idea de que el Estado asumió deudas al crear el IUNMa es un caballito de batalla de algunos medios de comunicación, que no se sostiene ante una mínima tarea de investigación.

Si bien en el Boletín Oficial se estableció la asignación presupuestaria para el 2016 correspondiente al Instituto, tales fondos no han sido transferidos al mismo, por lo cual actualmente no contamos con ningún presupuesto efectivo para el normal desarrollo de nuestras tareas. El Ministerio de Justicia no ha respondido nuestros reclamos al respecto, así como tampoco ha procedido al nombramiento formal de los docentes ni de la planta funcional para poder comenzar las clases, a pesar de nuestros insistentes pedidos.

Desde la creación del Instituto Universitario Nacional Madres de Plaza de Mayo hemos incrementado año a año la matrícula de estudiantes. El primer año (2015) hemos duplicado la cantidad de estudiantes ingresantes, inaugurando también la nueva carrera de Comunicación Social. Para este año (2016) hemos vuelto a duplicar la matrícula, organizando el Seminario de Ingreso a voluntad, con horarios rotativos para poder garantizar el acceso y la formación a aquellos/as estudiantes que siguen eligiéndonos para formarse profesionalmente. El crecimiento del IUNMA es innegable, siendo el único Instituto Universitario con orientación en Derechos Humanos, produciendo conocimiento en Jornadas y Seminarios organizados por nuestras cuatro carreras, desarrollando prácticas profesionales en territorio y procurando proponer una excelencia académica desde la selección de nuestros docentes.

La nota publicada en La Nación es poco rigurosa al compararnos con entidades educativas que dependen del Ministerio de Educación, mientras nosotros somos una unidad funcional dependiente del Ministerio de Justicia; cuando menciona estadísticas nacionales y las compara con los números de nuestro Instituto, específico en una orientación. Por otro lado, la cuenta que realiza el diario La Nación se limita a tomar el mencionado Presupuesto y dividirlo por la cantidad de estudiantes. Valen dos aclaraciones aquí: por un lado, el presupuesto real del Instituto es, hoy, “cero”, dada la falta de ejecución del mismo, ya mencionada; por otro, los estudiantes no son 1800, sino más de 2300, merced a la matrícula 2016. A su vez, el diario incurre en la falacia de no tomar en cuenta que hay costos que son irreductibles y no dependen en absoluto de la cantidad de alumnos/as: autoridades, infraestructura, estructuras de cátedra, etcétera, tienen “pisos” infranqueables, lo cual hace que sea casi obvio que cuantos menos estudiantes tiene una Universidad, más costoso es sostener a cada uno/a de ellos/as. Esto no es, además y como mal dice la nota, privativo del IUNMa.

Nuestro compromiso es con la educación pública y los Derechos Humanos, brindando calidad académica en la formación de futuros profesionales y sosteniendo nuestra responsabilidad en garantizar el acceso y realizar el seguimiento y apoyo de nuevos sectores sociales que acceden a la Educación Superior. Si hay desproporciones educativas en el manejo del IUNMa son responsabilidad absoluta del Gobierno Nacional y sus funcionarios y tales desproporciones obedecen a abandono y carencias indefendibles, no a excesos. Del mismo modo, si hay algo parecido a un “perverso manejo ideológico” implicado en la existencia del IUNMa, parece estar más bien del lado de los funcionarios del Estado que incumplen sus deberes más elementales. En algo concordamos: el IUNMa está siendo “escandalosamente administrado” por un Estado Nacional que a tres meses de aprobado un presupuesto no ha usado aun un solo centavo en conformidad con lo dispuesto en él. Damos por descontado que el diario La Nación investigará para qué se está usando ese dinero.