CONADU acompañó el masivo acto de cierre de campaña de Hugo Yasky

Antes de las 18:00 horas las primeras columnas conformadas por militantes populares  pertenecientes a las distintas organizaciones sindicales, políticas y sociales nucleadas al interior de la Central de los Trabajadores Argentinos, comenzaban a llegar al predio del Luna Park. La sede, que guarda miles de historias que ya forman parte de la iconografía argentina, fue el lugar elegido por los dirigentes que forman parte del núcleo que define la estrategia de campaña de Hugo Yasky, actual secretario General de la central sindical, para el cierre de campaña de la Lista 10.

Los números indican que al menos ocho mil personas lograron ingresar al estadio hasta desbordarlo por completo. A tal punto se sintió la falta de espacio que otros 1.500 militantes debieron quedar afuera del Luna Park. El dato no es menor, 9.500 asistentes indican el grado de adhesión que en las últimas semanas logró la lista 10 que encabeza Yasky.

Y ello puede traducirse, también, en la larga lista de dirigentes políticos, sindicales, de organizaciones sociales, del mundo de la cultura y la producción cultural que adhirieron y participaron activamente del cierre de campaña. Jorge Rivas, Carlos Heller, Martín Sabbatella, Vilma Ibarra, Patricio Echegaray, Ariel Basteiro  Luis D`Elía, son sólo algunos de los referentes políticos que pudieron asistir a un acto que implica la posibilidad de continuar profundizando un proceso político del cual Yasky y los dirigentes sindicales que lo acompañan son promotores: estatización de las jubilaciones, asignación universal, Ley de Medios, la reestatización de aerolíneas, son algunas de las iniciativas que ponderan el rol del estado y su fortalecimiento frente a quienes intentan reeditar las políticas de cuño liberal que imperaron en la argentina durante los años 90.

Soplan otros vientos en América Latina y ello involucra a la Argentina. Nuevas experiencias políticas que son el resultado de aquellas expresiones que resistieron el desguace del estado, lucharon contra la pobreza, defendieron el trabajo y pelearon por una distribución justa y equitativa de la riqueza durante la etapa más regresiva, en términos políticos, económicos, sociales y culturales, que vivió el país.

 “Ya no somos más la expresión de la testimonialidad. Aquella CTA que salía a la calle durante el menemismo fue necesaria, pero hoy estamos en una etapa de mayor madurez política: la testimonialidad nos queda chica”,   dijo Yasky a modo de balance de lo que fue la etapa de la resistencia y el inicio de una nueva época en la que la CTA se ha constituido como una verdadera protagonista en la lucha por una sociedad más justa y equitativa.

En ese sentido Yasky destacó que el espacio político y sindical que encabeza entiende “que haya sectores de la derecha que digan que este período político no pasa de ser un nuevo ciclo populista que se irá extinguiendo; lo que no podemos entender es que haya compañeros entrañables del campo popular que no ven que estamos construyendo un tiempo distinto. Por eso vamos a defender de estos nuevos tiempos todo lo que hayan sido conquistas para el campo popular”.

Reafirma entonces Yasky, quien fue el único orador del acto, la necesidad de “profundizar los cambios para que este proceso continúe” y sostiene una línea de acción en al que asegura que no van a “esperar que nos digan desde una oficina del gobierno o desde una central empresaria cuándo se puede o no avanzar. Las organizaciones de la clase trabajadora de Brasil, Ecuador, Bolivia y Argentina no tienen por qué coincidir con las políticas oficiales. Tenemos que apoyar los avances pero queremos también movilizar para ir por más.”

Hubo otras referencias acerca de la necesidad de avanzar en una “unidad de acción con la CGT” y que trabajar en función de la creación de una legislación que “impida el despido sin causa, así como universalizar el seguro de desempleo, las becas y el subsidio por nacimiento, como un horizonte de distribución que llegue a todos.

En un clima festivo acompañaron con cántico y banderas los docentes de la Ctera, los trabajadores de la Asociación Gremial del Subte, de CONADU, la Asociación del Personal Aeronáutico, telefónicos de Foetra y algunos sectores de estatales, como los trabajadores de la Legislatura y ATE Salud. Además de los movimientos sociales y organizaciones políticas como el Frente Transversal, la Tupac Amaru de la Capital Federal, el Comedor Los Pibes, el movimiento Segundo Centenario, Octubres y el MTL que conduce el Chapu Urreli.

 Secretaría de Prensa CONADU